La mujer ladrillo de Eduardo Rojas Rebolledo

La mujer ladrillo

Recién acabo de terminar de leer la mujer ladrillo de Eduardo Rojas Rebolledo y me queda aún esa poesía de su letras entreverada en las pestañas y la lengua . 

Citó :

“No podía hacer otra cosa que contemplar; tampoco pretendía mas. Hasta donde le llegaba la vista le parecía suficiente mundo para su cuerpo inmovil. Y se maravillaba, y se reía, todos los días , como si la sorpresa se dedicara ella de tiempo completo”

La historia de Milagro es un poema disfrazado de novela, es un llamado de atención hacia el sencillo arte del gozar per se . Esa mirada clara que degusta la existencia, el asombro perpetuo , ese ojo nuevo fresco lleno de imágenes,  que literalmente te secuestran al mundo de Milagro, la protagonista 

Esta mujer sin piernas ni brazos y con retraso mental que sin embargo planea sobre el infortunio , llevando alas de bugambilia  y un alma anegada agua.

Uno de los asuntos en que el ser humano más energía gasta es esta búsqueda de sentirse bien amado  , y si esta es la medida del éxito, Milagro triunfo  sobre esa broma macabra del destino que al final quedó burlado. 

Rojas Rebolledo nos lleva de la mano sin tocar el piso a ese mundo que perturba por que nos recuerda que tan lejos estamos de esa conexión de los sentidos,del sencillo arte de ser feliz con las pequeñas alegrías de la cotidianidad, con esa bendición del olvido raudo, pero de los cariños precisos.

Letras que danzan, arquitectura de la imagen que te imanta y te involucra.La vida de la mujer ladrillo es imperdible. Una mujer envuelta en una tragedia que amarga pero deja un regusto suave , dulce, que alucina al lector ,que sublima a Milagro  y nos envuelve,nos lleva en una vorágine que no permite soltar el libro hasta haber bebido cada imagen.

La acción transcurre en un pueblo, como tantos,que  se funda en la esperanza, en la fe y los sueños  y donde la vida se convierte en poesía de los detalles gracias a la pluma de Rebolledo,donde Milagro agradece la luz que la acaricia,el goce los sentidos , el agua que reconforta su universo.

Esta historia nos permite reencontramos con la parte mas humana de nosotros y resignificar la cotidianidad del día a día. 

Y los elementos de la naturaleza se vuelven inmensos , catedrales de sensaciones, y de esa pequeña y a veces menospreciada hermana de la felicidad que se llama alegría .

Y los goces serenos de la lluvia, el lodo, el viento,el vuelo suspendido de las flores de bugambilia y el olor pletórico del mar se suceden en sus paginas y toman  agigantados su lugar como protagonistas.

Cada linea es inesperada,suspendida entre la sorpresa y lo grotesco de una realidad  que golpea.  

Y cuando comienzas el cuaderno 2  la novela se crece, se desborda te toca en otra fibra . Nos convertimos en testigos del desenvolvimiento del amor, de ese que crece desde el profundo rechazo, estupor , amor odio y odio amor, hasta desembocar en un sereno cariño  , en un sentido de pertenencia, de raíz. 

Un amor que avasalla desde la ternura del que nada pide , que solo troca cuidado por miradas, que trasmina su tranquilidad anudada a los sentidos de la naturaleza hasta que está casi familia, casi gloria y casi infierno nos muestra todos sus matices . 

Este recorrido nos provoca una gama de sentimientos y emociones, en 122 paginas que nos sabe a poco nos reta a seguir la lectura, nos toman por sorpresa estos espíritus, sencillos y libres por tanto auténticos,que nos recuerda que una enramada y cinco metros de sombra pueden construir un mundo .

El sábado 05 de Noviembre estuve en el COBACH 04 de Cabo San Lucas acompañando en la presentación de este libro y ahí estuvo el autor. 

Un hombre muy agradable de hablar claro y sereno que con gran entusiasmo y sencillez conversó con los alumnos de este plantel, la sala audiovisual estuvo a reventar (y aclaro que no todos por ser una tarea de tal o cual asignatura ) , también estuvieron adultos entusiastas y seguidores de la pluma de Rojas Rebolledo.

El encuentro se alargó mucho más de lo previsto inicialmente y el autor con paciencia salomónica estuvo hasta el ultimo minuto firmando libros en una fila que parecía no terminar.

Muchas Gracias a Sandino Gámez que nos regala momentos únicos como estos,a su equipo del ISC, a Gerardo Muñoz por su extraordinaria participación en los comentarios y a la gente del COBACH 04 que nos permitió compartir con su alumnado  la visita de este brillante escritor. Gracias al fondo de cultura económica por esta maravillosa publicación en su serie letras mexicanas .

Gracias por esta oportunidad de gozar las letras de Eduardo Rojas Rebolledo por fin aquí en tierras Sudcalifornianas.

Besos, besos largos como ríos.

Sofía Chiquetts

Noviembre 2016 CSL